12/3/09

Parque Ecopedagógico Mururoa



En 1996, con el apoyo del programa RED de la Universidad Nacional de Colombia, la escuela buscó dar al trabajo ambiental el sentido de una propuesta pedagógica, en cuyo marco se comenzaron a introducir elementos conceptuales sobre ecología y medio ambiente, además de diversas campañas en pro de un ambiente sano.

Las acciones llevadas a cabo desde la escuela, lograron incidir de manera tangencial en los problemas ambientales de Baranoa, municipio que a pesar de ser considerado piloto en educación, se ha visto afectado por procesos de urbanización no del todo planificados y que de una u otra manera han venido incidiendo en el deterioro del entorno ambiental configurándose nuevas condiciones ambientales.

El interés por explorar y redescubrir la zona de nuestra escuela, conocida como Mururoa, surge del comité ecológico conformado por niños de 6º y 7º grado (año 1995) quienes exploraban esta zona con el propósito de reconocer y valorar la fauna y la flora aquí existente. Aquí se abordaban lecturas de carácter ambiental y uno de los niños en un recorte de prensa encontró la contaminación por radiaciones ocasionadas por los ensayos nucleares realizados por el gobierno francés en los atolones de la polinesia francesa, específicamente en Mururoa. Luego de esta lectura los niños exclamaron que ellos reconstruirían la vida de Mururoa en este lugar de la Escuela puesto que aquí se acumula el líquido esencial para la vida: El agua.

En 1999 se implementan acciones desde un abordaje interdisciplinario a través de la propuesta “LA EDUCACION AMBIENTAL COMO EJE ARTICULADOR DEL CURRÍCULO”
En la cual participaron los docentes Piedad Ordóñez, Alix Santiago y Miguel Rodríguez, quienes iniciaron el reconocimiento del potencial ambiental de Mururoa.

En el año 2001 los niños de sexto grado realizan una propuesta con la participación de diferentes disciplinas denominada por una Mururoa limpia. (Alex Castro, Alexis Sarmiento y otros)
En el año 2003 con la asesoria de la universidad nacional de Colombia a través del programa RED se consolida un colectivo interdisciplinario y se implementan los PIC, “Proyecto interdisciplinario de carácter curricular” el cual asume con un carácter mas investigativo la propuesta de la educación ambiental como eje articulador del currículo como intento por implementar formas mas abiertas y flexibles de organización curricular a partir de un trabajo interdisciplinar en torno a la problemática ambiental de la escuela y del municipio de baranoa, planteándose los siguientes interrogante:

¿Como propiciar la participación de las diferentes disciplinas a la problemática de las basuras (residuos sólidos)?

¿Cómo diseñar, implementar y evaluar una propuesta curricular interdisciplinaria donde la educación ambiental sea el eje articulador del currículo?
En este contexto la escuela orientaba sus acciones en pro del medio ambiente desde dos ejes por un lado el investigativo, que incluía el estudio y elaboración de conceptos como: currículo, interdicisplinariedad, medio ambiente, ecología, y por el otro la intervención en el ámbito escolar surgiendo así la necesidad de recuperar la amplia zona conocida como Mururoa concebida como un parque ecopedagógico que permita la sensilibilizacion del niño ante las múltiples formas de vida allí existentes, es decir un sitio propicio para el estudio y recreación baranoera.


Criterios de Evaluación del Aprendizaje.

Los criterios son opciones que se tienen para juzgar un objeto de aprendizaje.
(David Nevo)

• Desarrollo de la lectura autónoma y producción textual.

• Consideración y debate de los diferentes puntos de vistas.

• Presentación e implementación de alternativas para la solución de problemas concretos.

• Desarrollo de un alto nivel de participación en el trabajo académico.

• Apropiación y utilización de las nuevas tecnologías para el acceso al conocimiento.

• Apreciación y critica de las diferentes manifestaciones culturales.

• Desarrollo de actitudes que propicien la convivencia.

11/3/09

El Desarrollo De La Conciencia Crítica y La Autorrealización Como Base De La Propuesta De Formación ENSSA




La estructura curricular de la Escuela Normal se organiza a través de los núcleos del saber pedagógico los cuales generan la reflexión institucional, que la comunidad académica y pedagógica de la Escuela ha denominado campo de problema, orientada desde el siguiente cuestionamiento:

Este interrogante se constituye en el campo de problema a partir del cual se organiza el currículo de la Normal, pretendiendo que los estudiantes aprendan a comprender el mundo tal como lo han descrito quienes lo han estudiado y han vivido en él de una manera consciente; familiarizándose con la gama de logros alcanzados por otros seres humanos y aprendiendo a enfocar y supervisar su propia vida en función de las posibilidades humanas.

El campo del problema es la reflexión pedagógica institucional que sintetiza la razón de ser de la Escuela Normal (Propósitos, Misión, Visión, Filosofía y Objetivos).

Estos elementos aparecen plasmados en lo que para la Escuela Normal se han denominado Núcleos Problemáticos y que se concretan en los siguientes interrogantes:

De Pre-escolar a Básica Secundaria:

¿Cómo propiciar la formación de Normalistas Superiores con sentido de
pertenencia institucional y local capaces de establecer relaciones
gratificantes con los otros y con su medio?

Educación Media:

¿Qué competencias desde lo pedagógico son necesarias para la formación
de un Normalista Superior?

Ciclo Complementario:

¿Qué competencias desde lo pedagógico son necesarias para la formación
de un Normalista Superior para ejercer en los niveles de preescolar y básica primaria?

Los núcleos problemáticos son la operacionalización del campo del problema y tienen como misión darle respuesta en términos de conocimiento y formación, para lo cual es necesario identificar los elementos estructurales del conocimiento de las áreas.

De esta visión surgen los Núcleos Temáticos de las áreas definidos como una forma de organizar las estructuras epistemológicas de las áreas, tratando de conectar conocimientos provenientes de campos disciplinares especializados, con el propósito de proporcionar una experiencia de aprendizaje más significativa y globalizada para el alumno que aprende. Apoyados en Gardner y Aebli los maestros abordan la enseñanza de las disciplinas desde la verdad, la belleza y la bondad.

Las disciplinas comprenden un conjunto de supuestos y establecen unas prácticas determinadas constituyéndose en la mejor forma para abordar las cuestiones e inquietudes más importantes de una manera fiable y sistemática.

Los núcleos temáticos se fundamentan en que el conocimiento tiene una estructura que incluye conceptos, procedimientos, y criterios permitiendo una selección para ejemplificar lo más importante de los elementos estructurales.

La determinación de los núcleos temáticos por área de conocimiento permite definir los contenidos escolares, las actividades y estrategias didácticas, los recursos y logros esperados en términos de aprendizaje. Esta reflexión epistemológica fortalece el trabajo disciplinar, sentando las bases para iniciar una propuesta interdisciplinaria, más compleja y abierta a la innovación.

Cada colectivo por área organiza su propuesta curricular atendiendo a los siguientes aspectos:

- Sentido del área, misión y visión del área en la formación del Normalista Superior
- Justificación
- Objetivos
- Fundamentación pedagógica, teórica y epistemológica
- Contenidos, actividades y estrategias de evaluación acordes con la matriz de operacionalización    curricular
- Plan de acción anual del área

La mirada evaluativa a la propuesta curricular realizada por los colectivos docentes permitió identificar desde los núcleos temáticos de cada área, aquellos en los cuales existían puntos de convergencia y a los que los docentes dedican mayores esfuerzos, dando origen a los núcleos temáticos institucionales, definidos como elementos estructurales comunes a varias áreas del conocimiento escolar que permite organizarlas y disponerlas al trabajo interdisciplinar.

Los núcleos institucionales identificados por el colectivo docente y sus respectivas competencias institucionales son los siguientes:



MEDIACIONES PEDAGOGICAS.
Transferencia y aplicación de conocimientos, procedimientos y metodologías para comprender e intervenir el mundo en sus contextos vitales.

ESCUELA, CULTURA Y COMUNIDAD.
Desarrollo de la sensibilidad, la expresión y la creatividad para la comprensión y la recreación de la cultura.

AMBIENTE Y SOCIEDAD.
Comprensión de los fenómenos sociales para la adopción de posturas críticas y reflexivas sobre la realidad.

SISTEMA.
Comprensión y representación de las organizaciones naturales y sociales y sus transformaciones.

La construcción de estos núcleos que aglutinan las áreas y su estructura epistemológica permite a la Escuela Normal plantear la construcción de un currículo que de respuesta a los interrogantes formulados alrededor de la formación del normalista superior y plantear nuevas narrativas para resignificar las prácticas educativas institucionales. En otras palabras avanzar hacia un currículo alternativo y con sentido para quienes aprenden. De ahí surge el macroproyecto institucional: “El desarrollo de la conciencia crítica y la autorrealización como base de la propuesta de formación ENSSA” que se constituye para la comunidad educativa en una oportunidad para conocer mejor, a través de la investigación, el contexto escolar y local, criticarlo, reconocerse como ciudadano que posee conciencia crítica para identificar necesidades y proponer alternativas de solución que contribuyan a mejorar la calidad de vida de su Escuela y de su comunidad.

Con el macroproyecto la Escuela Normal emprende la aventura de producir un currículo interdisciplinario, problematizado y humanizado. Tomando como referentes a Álvarez Méndez (2001), Gimeno Sacristán (1998), Stenhouse (1991), Torres Santomé (1998), Freire (2002) y haciendo un análisis de sus propuestas educativas, se asume el reto de hacer del currículo un espacio en el que los contenidos apunten a la producción de conocimiento, el currículo es concebido como una exploración del conocimiento a través de la cual se investiga y se someten a prueba los presupuestos de partida.

Problematizar el currículo ha significado trabajar en función de la producción de conocimiento partiendo de problemas significativos que pertenecen al mundo de la vida del estudiante, del profesor y de la Escuela. Problemas que para ser resueltos requieren de la acción directa de los participantes, acción que les permite acceder a la comprensión cognitiva de los mismos y a la presentación de propuestas de intervención en la realidad. Desde esta perspectiva la concepción de conocimiento implica ser consciente de la condición del hombre como ser inacabado, de su inagotable capacidad cognoscente que debe ser estimulada y desarrollada.

La integración del currículo hace referencia a buscar formas de articular el conocimiento, y por ende la enseñanza, de tal modo, que se facilite la comprensión total de los fenómenos estudiados y del contexto sociocultural en el que surgen; además hay que tener en cuenta que existen problemas de la vida cotidiana cuya comprensión requieren conocimientos, destrezas y procedimientos que no se pueden ubicar fácilmente en el ámbito de una determinada disciplina, sino de varias que se ocupan de tal asunto. Se busca la cohesión y coherencia del currículo. Álvarez Méndez (2001:137) reafirma lo anterior cuando expresa que “necesitamos una organización curricular que tienda a la integración del conocimiento, una actitud abierta a la cooperación, a la emancipación, al diálogo, a las críticas”.

La humanización del currículo encierra la idea de la formación total del sujeto que aprende (ética, intelectual, estética, afectiva... humana), permitiendo el desarrollo de personas autónomas, críticas, democráticas y solidarias, comprometidas consigo mismas y con su entorno. La interdisciplinariedad, como lo plantea Torres Santomé (1998), posibilita el desarrollo de ciertos rasgos de la personalidad tales como la flexibilidad, confianza, paciencia, intuición, pensamiento divergente, capacidad de adaptación, sensibilidad hacia las demás personas, aceptación de riesgos, aprender a moverse en la diversidad y aceptar nuevos roles.

El currículo desde esta mirada requiere para su desarrollo de formas alternativas de organización escolar, más abiertas y flexibles que posibiliten el trabajo cooperativo y mancomunado de profesores y estudiantes. En este sentido el éxito del proyecto curricular depende de la consolidación del colectivo docente y de su capacidad para convocar y comprometer a los demás miembros de la comunidad educativa con la propuesta.

El núcleo común para el trabajo interdisciplinario, es abordado desde todas las áreas: el equipo, en el tiempo de tres horas semanales asignadas como seminario de investigación para el proyecto, planea, discute y propone contenidos, estrategias, acciones conjuntas y pertinentes, alianzas estratégicas, para emprender la indagación y producción de conocimiento alrededor del problema objeto de estudio, definido a partir del diagnóstico de necesidades e inquietudes con los estudiantes y padres de familia. Se diseñan materiales curriculares que permiten a los estudiantes y demás colegas la apropiación y desarrollo del trabajo.

Al mismo tiempo, en las tres horas semanales identificadas como seminario de investigación, los estudiantes, bajo la tutela del colectivo docente, desarrollan iniciativas para la toma de decisiones relacionadas con el proyecto y su implementación, realizan producciones textuales, artísticas, literarias, tecnológicas, disciplinares, en las cuales la interdisciplinariedad se hace evidente como resultado del proceso de conocer y de intervenir la realidad.


Esta propuesta curricular además de constituirse en un espacio para el desarrollo profesional de los maestros en ejercicio se convierte en un escenario de formación docente para los estudiantes del Ciclo Complementario quienes asumen este campo como parte de su trabajo de práctica pedagógica investigativa.






 




10/3/09

Del Realismo Mágico Nace una Escuela: Baranoa y el Surgimiento de su Escuela Normal



Baranoa es uno de los veinte y tres municipios en que ha sido organizado, para fines administrativos, el Departamento del Atlántico, al norte de Colombia. Está situado al centro del Departamento, 22 kilómetros al sur de su Distrito Capital Barranquilla; limita por el norte con los municipios de Galapa y Tubará; por el sur con el municipio de Sabanalarga; por el este con los municipios de Polonuevo y Malambo y por el oeste con los municipios de Juan de Acosta y Usiacurí.

Constituye el baranoero uno de los elementos representativos del tipo humano costeño colombiano y, por consiguiente, caribeño. Un 7 de agosto de 1.956, llegó a tomar posesión a la parroquia de Santa Ana de Baranoa el Reverendo Padre Juan De Jesús Serna. Sacerdote emprendedor, deseoso de cumplir con la misión apostólica que le fue encomendada convoca a un grupo de ciudadanos destacados de esta población y expone ante ellos la necesidad de crear para el municipio, una Escuela Hogar donde las jóvenes recibieran capacitación que les permitiera desempeñarse en diferentes campos tales como: Modistería, Secretaría, Enfermería, Repostería, Labores generales.

La idea del Padre Serna fue acogida con mucho entusiasmo por sus distinguidos invitados, en especial por Doña Olinda Oñoro de Gómez destacada educadora del municipio, quien inicia gestiones para sacar adelante esta iniciativa. El proyecto se cristaliza con la Ordenanza Nº 10 de 1.956 emanada de la Asamblea Departamental, por medio de la cual se creó el Colegio Público de Segunda Enseñanza para Señoritas que funcionó con la modalidad de Educación para el Hogar .

La Escuela Hogar, como se le denominaba, inició labores bajo la dirección de Doña Olinda Oñoro de Gómez, en el local donde hasta la fecha había estado durante años la Escuela de Artes y Oficios, que dio origen al Colegio Mixto de Bachillerato, situado en la plaza principal de la localidad.

La creación de la Escuela Hogar se enmarca precisamente en el período en que empiezan a ocurrir las transformaciones educativas en Colombia: En la década de los cincuenta se presentó el despegue de la expansión educativa en Colombia. Esta mejora en los indicadores educativos se ajustó a una serie de cambios políticos, demográficos y de estructura económica que vivió el país durante esos años (Ramírez, MT y Téllez, JP, 2006). Tal como lo señalan los anteriores autores, la primera etapa de esta expansión en los indicadores educativos se dio a pesar de la violencia política que vivió el país entre 1946 y 1957. El enfrentamiento entre conservadores y liberales y los trágicos resultados en términos de pérdidas de vidas humanas y destrucción física no impidieron la expansión en la educación sino que aportaron elementos a las clases dirigentes para destacar la importancia de la educación.

Es pues en los años cincuenta cuando comenzó a estudiarse el planteamiento integral de la educación. Hasta este momento, el desarrollo de las instituciones y políticas educativas respondió históricamente a la necesidad de llenar con urgencia los requerimientos del desarrollo más que a una directriz definida. Los esfuerzos de planeación se hacen una necesidad desde este momento y de esta forma se intenta darle forma al desarrollo del sector educativo basado en los diagnósticos y necesidades de la población, tal como ocurrió en el caso de Baranoa y la educación de las mujeres de la época.

La situación antes descrita propicia que el colegio público de segunda enseñanza para señoritas creado en Baranoa funcionara con la modalidad de Educación para el Hogar solo hasta 1.960, año en el cual los Honorables Diputados hijos de Baranoa, Doctores: Víctor Gallardo Barrios y Oscar Rodríguez presentaran el proyecto de Ordenanza para cambiar la modalidad a la institución. Es así como se aprueba la Ordenanza Nº 37 del 23 de noviembre de 1.960, por medio de la cual se ordena que la institución antes mencionada “funcionará a partir del 1° de Enero de 1961 como establecimiento de educación normalista y se denominara Instituto Pedagógico Santa Ana y continuará funcionando en el mismo edificio” (Artículo 1° de la citada Ordenanza).






La Historia de un Legado Pedagógico




Reconstruir la historia de la Escuela Normal Superior Santa Ana de Baranoa, desde sus orígenes hasta la actualidad, significa reconocer el amor, el empeño, la fe, el optimismo y la constancia de aquellas personas que hicieron parte de ella en algún momento, dejando a disposición de tantas generaciones tan valioso legado, logrando así traspasar el umbral del tiempo para inmortalizar tan grande obra.

Este artículo intenta reconstruir la historia de la Escuela Normal Superior Santa Ana de Baranoa desde sus orígenes en 1953 hasta el 2006, identificando en ese periodo el impacto generado por la institución en el desarrollo social, cultural, político y educativo en la comunidad baranoeras, así como también las características de la cultura escolar que la han configurado como Escuela Normal.

Este estudio histórico permite valorar todo lo que en el presente se tiene y que con mucho esfuerzo se obtuvo en el pasado; encontrar sentido y razón a cada uno de los sucesos históricos que han configurado lo que hoy conocemos como Escuela Normal Superior Santa Ana de Baranoa. La investigación, concebida desde el método histórico tuvo como propósito exponer la evolución y el desarrollo alcanzado por la Escuela Normal. Se trató de indagar el pasado con una penetración de los eventos y de las épocas para comprender en una visión unitaria el desarrollo de los acontecimientos pedagógicos, educativos y culturales que permitieron encontrar el movimiento interior de la historia crítica de la Escuela Normal.





4/3/09

Misión Institucional



La Escuela Normal Superior Santa Ana, asume como misión desde todos sus niveles, la formación inicial de maestros para desempeñarse en los niveles de Preescolar y Básica Primaria.

La propuesta de formación de maestros implica desarrollar en niños y jóvenes las condiciones académicas, pedagógicas y artísticas que le permitan apropiarse de su cultura, enriquecerla y transformarla en saberes a través del estudio, la investigación y la comunicación convirtiéndola en elemento fundamental de su práctica pedagógica didáctica cotidiana y como medio de expresión de su sensibilidad, de su creatividad y de sus valores, haciendo uso pleno de su talento y de sus potencialidades con miras a su autorrealización en el ejercicio de su profesión asumida con idoneidad, responsabilidad y ética.

Visión



La Escuela Normal Superior Santa Ana de Baranoa, se propone desarrollar una propuesta pedagógica clara y viable, acatada y puesta en práctica por todos y en la que los actores se comprometen a mejorar la escuela, la enseñanza y el aprendizaje para lo cual es necesario:

  • Consolidar equipos de estudio y reflexión para producir saberes pedagógicos.
  • Organizar el currículo a partir de los núcleos del saber pedagógico.
  • Generar nuevas formas de gestión escolar que permitan administrar la enseñanza y el aprendizaje en ambientes y espacios de interacción distensionada, estimulante y constructiva entre docentes y alumnos.

Filosofía Institucional



El punto de partida de la Escuela Normal Superior Santa Ana de Baranoa, es el SER HUMANO visto desde su doble condición de ser social e individual.

Por esta razón los principios filosóficos que rigen la normal están enmarcados dentro de un enfoque humanista.

La ENSSA orienta su filosofía hacia la formación de un maestro superior que propenda por el conocimiento de sí mismo, de la Naturaleza, de la Sociedad, de la Cultura y de la Pedagogía; a través del estudio, de la investigación y de la experimentación.

Un Normalista Superior idóneo y ético, orgulloso de su profesión y de su cultura, amante de la naturaleza y de lo estético, que crea y tenga fe en Dios, capaz de establecer una convivencia basada en el amor, la comprensión, la comunicación, el respeto y la tolerancia, que contribuya a la construcción de su proyecto de vida fundamentado en el servicio a la comunidad.